06-02-2015
DESPERTANDO
Era cómodo estar dormidos. Engañados. Sumidos plácidamente en la más elaborada trampa (bueno, la de las religiones tampoco ha sido pequeña, pero la dejaremos de lado hoy). De esta engañifa nace nuestro sistema avariento, el mismo que denigra a las personas para satisfacer los intereses del capital. Sí. Todo es mentira. Una mentira labrada por la siniestra inteligencia del dinero. ¿Que el dinero no tiene inteligencia? Pues, es posible, pero este último año, la gran banca, es decir, Santander, BBVA, Caixabank, Sabadell y Banco Popular, ha aumentado su beneficio un 27%, un beneficio ya, años atrás, escandaloso. La mentira nos decía que eso era bueno, que el enriquecimiento de los magnates empresariales y de los banqueros, salvadores de la patria, aportaría provechos para todos. Y nos lo creímos. Por fin, hemos visto que no era así. Ellos han multiplicado las ganancias en el mismo grado que el pueblo ha multiplicado las pérdidas (en lo económico, en lo social, en la educación, en la sanidad, etc.). Y si alguien piensa que esto no está montado para beneficiar a esas élites, ¿por qué pagamos sus deudas y, además, el Estado asume el coste judicial de la salida a Bolsa de Bankia? Mientras tanto, los representantes de la banca anticipan el cambio de ciclo económico. Y lanzan proclamas contra PODEMOS. Es que este partido no les debe nada, se lo debe todo a la gente, como vimos la otra semana en Madrid.
J.V.G.
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